"Seamos realistas; pidamos lo imposible"
Che Guevara

domingo, 28 de febrero de 2010

La "Teoría del valor"

Agua. Tumba eterna. Fuego. Purificación. Aire. Espíritu inmortal. Tierra. Vida mortal.
La vida acaba, y ascenderemos a los salones luminosos. Luego...un día se gestará la última batalla, y al lado de los dioses caeremos combatiendo. No hay pesar, no hay miedo. Todo está escrito. El Caos arrasará el mundo de los Hombres, y en lo alto, más allá del puente de colores, las casas eternas serán también derribadas.
No hay temor.
Sabemos que caeremos, sabemos que nuestra condena llegará. Estamos solos en la oscuridad, en un mundo frío y hostil. Los inmortales son nuestros capitanes, y a su lado pelearemos en la batalla final por la vida. Nunca decaeremos; el valor es nuestro único sustento, es nuestro estandarte. No hay nada más. Resistir lo es todo.
Somos peones... El juego comenzó mucho antes de que el primero de los dioses naciera, y acabará, quizá, con nuestra derrota. Estamos destinados al fin.
No hay salvación eterna, no hay paraíso.
Batalla, muerte, batalla. Resistir lo es todo.

Tal vez mañana... Ragnarok

miércoles, 24 de febrero de 2010

lunes, 8 de febrero de 2010

Aquello que se ha de construir

El mundo está enfermo....el mundo se cae.
(Debo aclarar, en primer lugar, que al referirme al mundo lo hago a la sociedad y a la propia existencia humana tal y como la conocemos).
Las nuevas generaciones han perdido el espíritu combativo, y con ello la fuerza. Dicen que vivimos bien, que a dia de hoy no hay por qué rebelarse; mentira. ¿Acaso la situación económica es esplendorosa, acaso todos los Seres Humanos que poblamos este viejo mundo vivimos en óptimas condiciones, con dignidad..? No. Los Humanos vamos ligados (se podría decir, casi, que por definición) a la imperfección, y mientras no haya justicia, dignidad e igualdad total y para todos, habrá algo por lo que luchar. Esto quiere decir (puesto que mientras las personas tengan emociones no existirá una justicia absoluta)que son unas condiciones que nunca se alcanzarán, pero que existen como meta y como brújula, y por acercarse a las cuales hay que combatir.
Pero es difícil cuando se trata de una sociedad (la de ahora y, más aún, la que viene) de sujetos conformistas y tremendamente egoístas, que han perdido por el camino esa conciencia social que tanto les costó forjar a otros (ya muertos), que vivieron y murieron para alcanzar un futuro mejor para las generaciones venideras.
Oigo decir que los políticos están todos corruptos, que ninguno vale... A la gente le aburre la política, opina que no va con ellos, y se queja del Gobierno, de los impuestos y de la exasperante lentitud de la burocracia. Me dan pena.
Me dan pena porque a pesar de ver la realidad no la comprenden, porque son demasiado vagos para actuar, porque tiene miedo al cambio; ¿Hemos de esperar sentados a que la ruina, el hambre y la guerra asolen nuestras tierras (España, Europa, el mundo...)?
¿Qué se necesita para llevar a cabo una revolución? No aguardemos a la deseperación;nos basta (o nos debería bastar) con nuestra voluntad.
La política es el primer paso. La sociedad parece haber olvidado que es la dueña de su destino, que muchos cayeron a lo largo de los siglos para recuperar el poder, que siempre nos ha pertenecido. Los presidentes, cancilleres y ministros son sólo depositarios de nuestra voluntad; cumplen una función, nada más. No son más que ningún otro, ni tienen mayores derechos. La política es cosa de todos. El primer paso es hacer memoria, y ejercer esa voluntad: creer en el sistema para mejorarlo y, si es necesario, cambiarlo.
Cuando un Zapatero pierde popularidad, un Rajoy la gana...¿Por qué?¿Acaso somos todos imbéciles? No es mejor uno que otro; sólo cacarean y se pasan la pelota, tratando de que la patata caliente no les explote en las manos. Esos son los que más asco y pena me dan.

Acomodados en el poder, saben que sólamente deben debilitar al contrario hasta llegar arriba(y si caen, vuelta a empezar): eso ocurre porque cuentan con que todos esos ididotas que dicen "para que votar a otro, si siempre ganan los mismos" van a entregarles de nuevo su voluntad y su destino.
Si la sociedad no cree en un cambio, ese cambio nunca se producirá.

Y mientras, tantos y tantos millones de imbéciles acomodados, holgazanes, conformistas y sin espíritu crítico ahogan su fuerza en alcohol, coca, fútbol y moda....

Si Trotsky levantara la cabeza..